Personalizar las preferencias de consentimiento

Usamos cookies para ayudarle a navegar de manera eficiente y realizar ciertas funciones. Encontrará información detallada sobre cada una de las cookies bajo cada categoría de consentimiento a continuación.

Las cookies categorizadas como “Necesarias” se guardan en su navegador, ya que son esenciales para permitir las funcionalidades básicas del sitio web.... 

Siempre activas

Las cookies necesarias son cruciales para las funciones básicas del sitio web y el sitio web no funcionará de la forma prevista sin ellas. Estas cookies no almacenan ningún dato de identificación personal.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies funcionales ayudan a realizar ciertas funcionalidades, como compartir el contenido del sitio web en plataformas de redes sociales, recopilar comentarios y otras características de terceros.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies analíticas se utilizan para comprender cómo interactúan los visitantes con el sitio web. Estas cookies ayudan a proporcionar información sobre métricas el número de visitantes, el porcentaje de rebote, la fuente de tráfico, etc.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies de rendimiento se utilizan para comprender y analizar los índices de rendimiento clave del sitio web, lo que ayuda a proporcionar una mejor experiencia de usuario para los visitantes.

No hay cookies para mostrar.

Las cookies publicitarias se utilizan para entregar a los visitantes anuncios personalizados basados ​​en las páginas que visitaron antes y analizar la efectividad de la campaña publicitaria.

No hay cookies para mostrar.

GRANDES DISCOS: Face Value – Phil Collins (1981)

Repasamos el disco solista debut del genial baterista de Genesis y Brand X. Minimalismo, sentimiento y un tema que cambiaría el sonido de los 80.

Para 1980 Phil Collins se hallaba en un momento crítico personal y profesional. Su matrimonio se había desintegrado producto de elegir la vida itinerante de músico como prioridad y su banda Genesis, como todo el rock progresivo, se encontraba prematuramente en riesgo de extinción tras la explosión de las bandas new wave, punk y la música disco. En ese contexto, el baterista se encierra en un estudio de grabación muy básico montado en su casa y se decide a componer y grabar en forma artesanal un puñado de canciones de confección propia. Algunas de ellas (MisunderstandingPlease don´t ask) fueron a parar a Duke, el disco con el que Genesis despide a los ’70. El resto empezó a formar parte de algo a lo que Collins se empieza a animar a transformar en su primer disco solista.
Para ello entrega los demos a Hugh Padgham, ingeniero de sonido y productor estrella de los ’80, a quien había conocido grabando el tema Intruder para uno de los discos solistas de Peter Gabriel. Padgham logró en ese disco un sonido increíble en la batería, producto de un accidente en la consola, que voló la cabeza de Phil Collins: el famoso sonido «bombástico», que luego haría que el productor recalara en Genesis para la grabación de Abacab, reformulando a la banda de cara a la nueva década. Pero esa es otra historia.

Phil Collins es en Face Value un músico genial y un crooner confirmado. Hay sentimiento en This must be love y en la fantástica balada sensual If leaving me is easy. Aparecen en el disco además los preferencias musicales de Collins sin espacio en Genesis: los bronces, el r&b, los coros. Escuchar con atención todo esto en I messed again, por ejemplo. El disco es además una típica expresión de primer disco solista: autoreferencia, sentimientos personales, mucho clima, grabación casi minimalista. También hace una declaración de principios musicales, reversionando Behind the Lines de Genesis, como a él le hubiera gustado que sonase. El arte de tapa es muestra de ello: un primerísimo primer plano de la cara del músico. Hace unos pocos años, a propósito de la reedición de este gran disco, Phil Collins renovó la tapa repitiendo la fotografía con su apariencia actual.

Mientras Collins se encierra con sus compañeros de ruta a grabar un nuevo disco de Genesis, Face Value explotaba en los charts de venta de discos, transformando a su autor en una nueva estrella solista de la industria discográfica. El tema que lo había cambiado todo era In the air tonight. ¿Qué nos cuenta esta increíble canción intimista, casi mística, tan personal y conmovedora? Que cada uno lo sienta al escucharla. Todo el desarrollo tiene un clima irrepetible, envolvente, hasta que de pronto la entrada de la batería hace que ese vuelo musical y poético nos transporte. In the air tonight es una verdadera construcción de orfebre, una gema musical inigualable y el legado musical más profundo que Collins regalara en todo su carrera solista. Face Value es un disco para volver a escuchar cada vez que tengamos el alma sensible y los sentimiento a flor de piel.

Nuestras redes sociales:

Conoce al autor del post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver arriba